Lo Que Verdaderamente Tiene Valor Para Dios


Mientras escribo este artículo nos encontramos en la temporada de frio en los Estados Unidos. En los estados del norte de la nación los cambios que se requieren para enfrentar el invierno son muchos. Uno de los más importantes, es el tipo de ropa que se necesita usar para enfrentar las inclementes condiciones del tiempo.

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Una vez pasa el frio, ya no se requiere usar la ropa de invierno y la vida regresa a su normalidad. Es común visitar los parques, los niños jugar en la calle, las familias salir de paseo, en fin, es una libertad que el invierno no permite que se disfrute.

Ese es el punto de Pablo en estos versículos. Por más de mil años Dios había tratado con Israel a través de la ley. Este era su tiempo de invierno, una temporada de espera. Durante el invierno hay maneras de vestirse y viajar que son apropiadas para esa temporada. Pero, si resistes abandonar lo que estaba diseñado solo para funcionar en el tiempo de frio, crearas unas situaciones innecesarias en tu vida que harán muy difícil que disfrutes la nueva temporada de primavera.

Lo que Pablo quiere que los creyentes en la iglesia de galacia entiendan es que ya la ley cumplió su propósito, la nueva creación está presente y para los que están en Cristo un nuevo día le ha amanecido.

Verso 1

Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.

Si los gálatas eran persuadidos como gentiles a ser circuncidados, son como los que siguen usando ropa de invierno en el tiempo de verano. Para Pablo esto no era algo insignificante. Por fuera parecía fácil, pero detrás de todo había algo que ellos no habían medido; y esto era, que si se circuncidaban tenían que guardar toda la ley.

Verso 3

Y otra vez testifico a todo hombre que se circuncida, que está obligado a guardar toda la ley.

La única razón para circuncidarse era si había la intención de someterse en cada área de la vida a la completa disciplina de la sinagoga judía. Para Pablo, la decisión era absoluta. No podían ser ambas. No era un poco de Cristo y un poco de Moisés.

Tampoco, es como dicen algunos, Cristo te salva, pero la ley te mantiene santo. Si estas en Cristo, no es necesario vivir por la justicia de la ley. Si guardar la ley es la razón por la cual eres justo, lo que estás diciendo es que de Cristo te desligaste.

Verso 4

De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído.

La salvación en Cristo es cien por ciento por gracia sin aditivos.

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En el caso de los gálatas era la circuncisión, pero para nosotros puede ser cualquier cosa que le añada a la obra de la gracia – reglas de una iglesia, disciplinas espirituales, confesión de pecados, etc. Algunas de estas cosas no son malas en sí mismas, lo que quiero que sepas es que nada absolutamente nada le añade o mejora la obra perfecta de la cruz.

Es importante que comprendas lo que el texto no dice: “Caer de la gracia” – no es perder la salvación. Pablo nunca les dijo a los gálatas que estaban perdiendo su salvación, lo que si les dijo fue que “estaban usando su libertad para ocasión para la carne”.

En vez de caminar en el Espíritu, (que no tiene nada que ver con orar, ayunar, congregarse, pactar) los gálatas se estaban destruyendo a ellos mismos.

Verso 15

 Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros.

Remueve la gracia de una comunidad de creyentes y lo que pronto tendrás son las obras de la carne a diestra y siniestra. Si quieres saber cuáles son hay una corta lista, no incluye todo, en los versos 19-21 de este capítulo 5.

Estar en Cristo, Pablo lo resume en dos poderosas declaraciones.

Primero, “Pues nosotros por el Espíritu aguardamos por fe la esperanza de la justicia”. Gálatas 5:5

El énfasis de esta declaración está en el futuro “la esperanza de la justicia”. Pablo habla de un tiempo en el cual Dios mismo declarara públicamente que todos los que están en Cristo son su verdadero pueblo. Este evento se “espera” (aguarda) “por el Espíritu”, y por fe la “esperanza”.

Lo que Pablo está haciendo aquí es impresionante. El, está afirmándole a los gálatas que la esperanza del futuro aquí y ahora no depende de una marca en el cuerpo (la circuncisión) sino en la nueva vida que tienen en el Espíritu. Es la vida en el Espíritu la que nos empodera a vivir para Dios no el cumplimiento de ritos y ceremonias externas.

Esto es lo que explica el verso 6.

porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la circuncisión, sino la fe que obra por el amor.

Segundo, Lo que los gálatas todavía no habían entendido era que la marca distintiva de la familia de Abraham, no era una operación física sino la “fe que obra por el amor”.

No es simplemente una fe que cree en un conjunto de doctrinas sino una fe que “obra” – no por medio de la ley, sino por el amor.

La ley era el sello del Antiguo Pacto, la circuncisión era la evidencia física, ambos distinguían a los judíos de todas las naciones de la tierra. Pero el amor, es para todos, no importa que apellido tienes, a que grupo étnico perteneces, pero aún más el amor es la razón por la cual Dios mismo le da la bienvenida a todos los creyentes a su familia.

Esta misma motivación y fuerza es la que debe estar presente en la comunidad de los creyentes y por la cual se les da la bienvenida a todos los hermanos.

¿Crees tú que la iglesia camina en amor tal y como lo ha recibido del Padre?

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