Lecciones Practicas de la Resurrección


La resurrección no es solo una declaración de fe sino un hecho documentado en la Biblia y en las páginas de la historia.

Ha sido cuestionada, racionalizada, debatida, desmentida, pero también creída por millones que a través de la historia han confesado que su vida ha sido transformada por un Cristo resucitado.

Articulo Pastor Tommy Moya

La resurrección trasciende mucho más que  a un tiempo específico de la historia como un evento – lo que la resurrección en realidad significa es algo que los creyentes viven diariamente en sus vidas y experiencias.

Lecciones Practicas de la Resurrección

1. La primera lección que podemos aprender de la resurrección es: Que los días oscuros no duran para siempre.

Días antes de la resurrección de Cristo las cosas no se veían muy alentadoras.

  • Judas lo había traicionado.
  • Una mafia religiosa y política lo estaba acusando falsamente.
  • Los que caminaron con él lo abandonaron.
  • Le pusieron una corona de espinas – imagínese la sangre y el dolor.
  • Lo clavaron a una cruz.
  • Traspasaron su costado con una lanza.
  • Lo vituperaron.
  • Lo escupieron.

Mateo dice en su evangelio que los que pasaban meneaban su cabeza y blasfemaban contra él. Le decían tu que destruyes el templo y en tres días lo reconstruyes sálvate a ti mismo, si eres el hijo de Dios sálvate a ti mismo.

Los religiosos se burlaban de él. Otros querían más evidencia y decían – pero no decía el que era hijo de Dios porque no se salva y se baja de esa cruz. Los bandidos en la cruz lo insultaban.

Como si fuera poco el Padre quita del su mirada y el experimenta un sentido de abandono y grita: Dios mío Dios mío porque me has abandonado.

Se oscureció, la tierra tembló, de repente la esperanza se había perdido – 3 años de hacer bien solo serían un recuerdo – sus discípulos regresaron a la pesca frustrados y desilusionados.  Pero la tumba vacía dice: Los días oscuros no duran para siempre. Al tercer día se sacudió la tierra – donde esta o muerte tu aguijón o sepulcro tu victoria.

Yo no sé por lo que tu estas pasando :

  • Lo miedos que te han sobrecogido.
  • La inseguridad que te agobia.
  • El dolor que están experimentando.
  • Las cuentas que no puedes pagar.
  • La casa que estás perdiendo.
  • La gente que te ha lastimado.
  • No sé qué desilusiones estas enfrentando.
  • La enfermedad que te han diagnosticado.

Lo que yo sé es que por cuanto Cristo ha Resucitado los días oscuros no duran para siempre.

  • Él sabe lo que tu estas pasando – el paso por ahí.
  • Él sabe lo que tu estas sintiendo – el paso por ahí.
  • Él sabe lo que es agonía, rechazo, traición, dolor.

Por el eso el escritor de la carta a lo Hebreos dice: “porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nosotros…”

[shareable]La resurrección nos enseña que los días oscuros no duran para siempre.[/shareable]

2. Segunda lección de la resurrección es: Nada está fuera del alcance del poder de Dios.

El día de la muerte del Señor los soldados se aseguraron de que Cristo estaba muerto.

Lo golpearon – le pasaron una lanza por su costado – lo crucificaron – le sellaron la tumba – y pusieron una guardia ante la tumba para asegurarse que sus discípulos no se robaran el cuerpo y luego dijeran que él había resucitado.

Los discípulos se llenaron de temor e inseguridad y se devolvieron a la pesca – estoy seguro frustrados y desilusionados. Los romanos, los religiosos y hasta el mismo diablo se aseguraron que de allí no saliera. Lo que ellos no sabían es que no hay nada fuera del alcance del poder de Dios.

La resurrección te dice no hay nada fuera del alcance de Dios – si Dios resucito a Cristo de entre los muertos yo estoy seguro que él va a poner su mano sobre lo que tu estas pasando.

Isaías 54:17
No prevalecerá ninguna arma que se forje contra ti; toda lengua que te acuse será refutada. Esta es la herencia de los siervos del Señor la justicia de mi procede.
3. La tercera lección de la resurrección es que: Los malos tiempos no son un desperdicio.

El día en que el Señor fue humillado, golpeado, vituperado, despreciado, escupido y crucificado en aquel momento parecía que no tenía sentido.

De hecho sus discípulos no lo entendieron. Si fue difícil mientras estaba vivo que se podrá lograr ahora que está muerto.

  • 3 años de ver milagros.
  • 3 años de grandes lecciones sobre la vida y el reino.
  • 3 años de multitudes siguiéndolos.

Por algún lado de su mente se tienen que haber hecho la pregunta: ¿habrá valido la pena?

  • Dejamos nuestras profesiones para seguirlo.
  • Dejamos nuestras familias para caminar con el.
  • Pusimos en el nuestra confianza y esperanza.
  • Dimos tiempo, dinero, le servimos.
  • Seria verdad lo que nos decía.

¿Y ahora qué? Mira como ha terminado esto. ¿Valdrá la pena?

Estas preguntas no se hacen cuando todo va bien y los panes y los peces se están multiplicando y los paralíticos están caminando y los ciegos están recibiendo la vista y los muertos están resucitando y las manos secas se están restaurando.

Esta pregunta no se hace cuando la fama está en aumento – las masas salen a verlos y escucharlos – la reputación es buena.

Estas preguntas se hacen cuando toda la esperanza se perdió, nada está pasando, la esperanza está enterrada, no se ve un mejor futuro al fin y al cabo murió.

Es ahí que uno se pregunta:

  • Habrá valido la pena tanto sacrificio.
  • Yo que daba de lo que no tenia.
  • Yo que ayude a tanta gente.

Y mira ahora como estoy:

La resurrección nos enseña que los malos tiempos no son un desperdicio.

Los malos tiempos no son para cuestionar si valió la pena o no sino para permitir que Dios reorganice nuestra vida de acuerdo a su propósito.

Romanos 8:28 
Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que ha sido llamados de acuerdo con su propósito.
Cristo entro a la tumba como el cordero de Dios que quita los pecados del mundo – pero salió de ella como el Rey de Reyes y Señor de Señores.

Tu no saldrás igual a como entraste a tu sufrimiento.

La resurrección nos enseña que si estás pasando por malos tiempos eso no es un desperdicio.

Tu dolor vino con una promesa. Tus pruebas no son un desperdicio.

4. La cuarta lección que nos enseña la resurrección es que: Vienen días mejores.

Luego de pasar por el vituperio, humillación, luchas, dolor y angustias puedes estar seguro que vendrán días mejores.

  • Después de un gran desierto hay una tierra prometida.
  • Después de mucha tristeza vendrá un cántico de alegría.
  • Después de un fuerte invierno siempre vendrá una hermosa primavera.
  • Después de una violenta muerte siempre vendrá una gloriosa resurrección.

 La resurrección nos enseña que vienen días mejores.

La Biblia dice que Cristo murió una sola vez y para siempre. Hay cosas que tú no volverás a pasar – porque vienen mejores días.

Mientras estemos aquí en la tierra muchas cosas pueden suceder pero recuerda después de cada una de ellas vienen mejores días.

En conclusión:

Por causa de la resurrección:

  • Los días oscuros no duran para siempre.
  • Nada está fuera del alcance del poder de Dios.
  • Los malos tiempos no son un desperdicio.
  • Los futuros días serán mejores.

Estas son algunas de las lecciones de la resurrección. Gloria a Dios – Cristo ha resucitado.

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