Descanso En Cristo No Es Falta De Acción

De vez en cuando recibo algún correo electrónico o comentario en los medios sociales sobre alguien acusándome que estoy promoviendo la vagancia en el cuerpo de Cristo o que estoy engañando a la gente haciéndole pensar que ya todo está hecho y ellos no tienen que hacer nada más, en otras palabras, “siéntese y espere que todo suceda”. La ignorancia es atrevida, porque:

1. Yo personalmente trabajo duro – en ocasiones 60-70 horas a la semana.
2. Estoy convencido que los que hemos entendido el descanso en Cristo, trabajamos más y mejor que los que más duro “trabajan”. Es extraordinario lo que el descanso puede hacer.

La mentalidad de que todo lo que Dios tiene para ti te lo tienes que ganar y esforzarte para lograrlo, es un tema favorito en muchos círculos de la predicación legalista. Para la mente natural esto tiene sentido. Después de todo, “nada es gratis en la vida”, “trabaja ahora y disfruta después”, así es como el mundo funciona. Si tú crees en ese mensaje de que te tienes que ganar el favor de Dios, y trabajar duro para mostrarle que estas agradecido, de seguro “caerás de la gracia” porque dejarás de confiar en la obra perfecta de la cruz, para confiar en lo que tú mismo puedas hacer para ganarte el favor de Dios, otra manera de decir esto más cruda es “te quieres salvar a ti mismo”. ¿Qué dice la Biblia sobre el descanso (reposo)?

Hebreos 4:9-11

Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios.

Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas. Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.

Muchos leen, “Procuremos, pues, entrar en aquel reposo” y creen que el texto le está diciendo que se tienen que esforzar, trabajar duro y ganarse la aprobación de Dios y algún día podrán descansar. Pero, eso no es lo que el texto quiere decir. No se puede predicar el verso 11 sin el verso 10, “Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.” Esto no se está refiriendo a tu futuro retiro en el cielo, literalmente significa reposar de “tus propias obras”. Reposo significa reposo, no es complicado. Las obras de las cuales descansamos son las obras muertas de tratar de ganarnos el favor, la unción, la bendición, y la aprobación de Dios. Lee el contexto y descubrirás que se está refiriendo a la incredulidad que tenían los hijos de Israel. Ellos trataron de ganarse lo que Dios le quería dar y como consecuencia nunca entraron al reposo de Dios. Si tú no crees que ya Dios te ha bendecido con toda bendición espiritual en Cristo, entonces pensaras que tienes que hacer algo para ganártela. Si no crees que ya Dios te acepto en Cristo, harás cosas para sentir que eres aceptado, y nunca descansarás. Te vas a cansar al punto de agotamiento extremo tratando de ganarte lo que ya el Padre te ha dado. Una evidencia de que no has entrado al “reposo” de Dios en Cristo es que estas “tratando” en vez de “descansando” y el resultado es ansiedad e inseguridad. Siempre te estarás preguntando, ¿será esto suficiente? El asunto no es lo que tú haces sino lo que tú crees, porque lo que haces emana de lo que tú crees. El problema de Israel no fue que desobedecieron la ley, sino que no le creyeron a Dios.

Hebreos 4:2

Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron.

[shareable]El asunto no es lo que tú haces sino lo que tú crees, porque lo que haces emana de lo que tú crees.[/shareable] El descanso del cual habla la Biblia no es falta de acción sino negarte a confiar en ti mismo y que tus obras logran algo que Cristo no logro por ti. Cuando entramos al reposo de Dios dejamos de confiar en nuestras habilidades y echamos toda nuestra ansiedad sobre El. Con razón podemos hacer tanto y no vivimos en el mismo nivel de estrés que vive el mundo. Entrar al reposo de Dios no es “sentarte a esperar que todo suceda” o “falta de acción”, lo que significa es que ya no lo tienes que hacer tu solo. Puedes descansar en que el Señor está obrando en ti. Puedes descansar en saber que cualquier obra que tengas que hacer Él la ha preparado para ti desde antes de la fundación del mundo para que camines en ella. En estos últimos años me he propuesto experimentar el reposo del Señor de una manera práctica. Ahora, cuando los problemas llegan mi reacción primaria no es, ¿Qué tengo que hacer para resolver esto? sino, ¿Qué dice el Espíritu Santo? Estoy aprendiendo a descansar en que su guianza, es mejor que mis opiniones. Cuando la vida te golpee, llegan las malas noticias y no hay nada en tus circunstancias naturales que te de consuelo y esperanza – camina por fe y no por vista. Mira sobre lo que estás viviendo hoy y ve a un Padre que te ama y quiere lo mejor para ti. Afírmate en Su palabra y escoge creer las cosas buenas que dice de ti – y serás una casa que no podrá ser estremecida. Los vientos no los podrás evitar, lo que puedes decidir es como responder a ellos. Después de todo esto vete a trabajar en paz.

---

Profundiza en el conocimiento del Eterno Propósito de Dios en Cristo. La Comunidad Virtual Transformados En Cristo te ofrece un portal libre de religiosidad donde lo único que aprendemos es a Cristo. Échale un vistazo – jamás serás igual. Oprime la imagen abajo.

Lo Que Otros Están Experimentando

---

[endorsement cite="Ivette"]Gracias por esta impartición amado pastor Tommy. Saboreo a Cristo en cada clase porque usted es un apasionado por Cristo y eso es lo que percibimos en cada impartición. Doy gracias a Dios por formar parte de esta comunidad. Saludos y bendecidos todos![/endorsement]

[endorsement cite="Yahaira"]Wow, Sin palabras. Maravillosa verdad. Oro por cada miembro de esta comunidad para que nos presentemos como sacrificio vivo para el propósito y la manifestación del misterio.[/endorsement]

[endorsement cite="Carlos"]Muy feliz de ser parte de este mover de vida y poder ser impartido para la plena edificación del cuero de Cristo. Esta clase magistral nos revela en la ciudad que muchas veces estamos todavía sumergidos. [/endorsement]