Este artículo inicia una serie de escritos sobre la carta del Apóstol Pablo a los creyentes en Galacia, mejor conocida como la epístola a los Gálatas. Para sacar el máximo provecho de estos estudios es importante que leas los versículos que corresponden al tema que se está considerando.
Derecho de autor : Roman Sigaev
En un tiempo donde los creyentes obtienen su conocimiento teológico de los estatus de Facebook y los 140 caracteres de Twitter, es importante que revisemos el fundamento del verdadero evangelio, entre tanto ruido religioso.
Comencemos…
Remóntate por un momento a Turquía en los años 50-60 AD, durante el reinado del Emperador Romano Claudio. La mayoría de tus vecinos son paganos, adoran los dioses o diosas locales y muchos declaran su fidelidad a ciertos grupos étnicos.
Muchos han comenzado a adorar al emperador y con él, el poder del imperio. También, en la localidad se encontraba un pequeño grupo de judíos con su propia sinagoga. Estos, están siendo amenazados con el creciente poder del culto imperial, sumado a la común perversión e idolatría.
De repente aparece un raro personaje llamado Pablo. Se presenta como un edificador, según él, no de edificios de piedras sino de personas.
La forma en como edifica es diferente a lo que cualquiera haya conocido antes. El, pone los fundamentos de este edificio por medio del anuncio de una noticia, una noticia que es tan buena que es escandalosa.
Según Pablo, hay un solo Dios, el creador del mundo (eso para los judíos no era noticia) y este único Dios ha revelado su eterno propósito para la humanidad. Esta revelación se efectuó en un judío llamado Jesús; y decía Pablo que ese Jesús es el Mesías Judío. Esta proclamación era amenazante para el imperio y un reto para el emperador Claudio.
Los romanos lo crucificaron y no debe de extrañarte porque eso era lo que hacía el imperio a los reyes de otros pueblos. Pero, a este Jesús, Dios lo resucito de entre los muertos – anunciaba Pablo.
Ese era el principio de las buenas noticias que Pablo proclamaba. Pero, eso era solo el principio. No solo Dios había resucitado a este Jesús, el mesías Judío sino que su muerte y resurrección significaba que Dios ahora está edificando una nueva familia, una sola familia, una familia sin divisiones, sin separación racial, una sola mesa para judíos y gentiles.
Los judíos creían que cuando el Mesías viniera el seria el Señor de todo el mundo; lo que Pablo argumentaba era, que ahora el solo tenía una sola familia y que aunque esa familia era lo que Dios le había prometido a los judíos, lo impresionante es que no tienes que ser judío para pertenecer a ella.
El Dios de Israel ahora quiere ser conocido como Padre por toda la humanidad.
Con estas noticias, Pablo estaba estableciendo el fundamento de este edificio en toda la región sur de Turquía.
No había pasado mucho tiempo cuando aparecieron las malas noticias. Otros edificadores aparecieron diciendo que Pablo no sabía lo que estaba haciendo. ¡Cuidado! Este Pablo es peligroso y lo que está enseñando te puede causar muchos problemas.
Nosotros tenemos información de primera mano, decían ellos. Nuestra fuente no es lo que otros están hablando sino las verdaderas autoridades. (Si le suena parecido no crea que es una casualidad).
Lo que él está diciendo es media verdad. Nosotros también creemos que Jesús es el mesías; pero este asunto de tener los judíos y los gentiles en la misma familia no es así.
Si ellos (los gentiles) quieren ser parte de los escogidos de Dios, la familia que Dios le prometió a Abraham, tendrán que circuncidarse. Ah, y también guardar la ley, porque esto es lo que nos mantiene separados de los gentiles.
Esas eran las noticias que ellos anunciaban; eres bienvenido a la familia de Dios si observas la ley de Moisés. Quizás, ahora el primer capítulo te hace sentido y comprendes las contundentes declaraciones que Pablo hace.
El Apostolado y el Evangelio
Si no entendemos estos dos términos la carta no tendrá sentido, proponte comprenderlos y todo caerá en su lugar.
El argumento de los rivales de Pablo era, que Pablo era un apóstol de segunda clase. La palabra apóstol en su definición más básica es “uno que es enviado” y era el término que identificaba a los que Jesús había enviado luego de haber resucitado.
Por lo tanto Pablo no fue uno de los doce originales lo cual lo descalificaba para ser un verdadero apóstol y tener un mensaje legítimo. (Si le suena parecido no crea que es una casualidad).
Ellos por su parte recibieron su mensaje y apostolado (decían ellos) de los apóstoles de Jerusalén, los verdaderos y originales, apóstoles de la talla de Pedro y Santiago, el hermano de Jesús.
Están equivocados, le respondía Pablo. Mi apostolado y comisión de edificar una nueva familia, viene de Dios mismo, y de Jesús el Mesías. La visión en el camino a Damasco es central para entender la teología Paulina.
No solo el apostolado viene de Dios sino que también la buena noticia que proclamo – “el evangelio”.
Para Pablo, el evangelio no era un nuevo sistema de salvación o una nueva manera de ser religioso. El evangelio es la buena noticia de que Jesús, el mesías crucificado, ha sido exaltado como el Señor de toda la humanidad, por lo tanto él está formando de entre todos los hombres una nueva familia.
[shareable]El evangelio no es un nuevo sistema de salvación o una nueva manera de ser religioso.[/shareable]
Este es el verdadero evangelio, proclamaba Pablo. Cuidado con imitaciones. Es más, si alguno les predica otro evangelio evítenlos, aun si fuera un angel del cielo, esta gente no son una bendición, más bien son una maldición. (Sea anatema)
El reto del primer siglo sigue siendo el reto de nuestro siglo. El enfoque apostólico de Pablo, era edificar una sola familia en la cual Cristo fuera el único fundamento, este evangelio se ha predicado con cierta medida de efectividad y también con mucha mezcla.
Para los que Dios mismo ha comisionado a predicar ese evangelio sigue siendo un gran reto como lo fue para Pablo en el primer siglo.
La rivalidad étnica y la hostilidad no han disminuido. ¿No crees tú que es tiempo de que la iglesia redescubra el evangelio apostólico y aprendamos a vivir por él?
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