Sera posible que tú mismo(a) estés saboteando la posibilidad de vivir al máximo?
Ninguno de nosotros se ha formado en un vacio. Todos somos la suma de las experiencias acumuladas a través de la vida. Esas experiencias han contribuido de alguna manera a que seamos la persona que somos hoy.
Para lograr vivir la vida al máximo es indispensable que muchas de las experiencias vividas sean re-interpretadas y los hábitos que se formaron sean superados. Una de las cosas más difíciles es romper con los hábitos que han formado patrones de pensamientos negativos.
Hasta que no hagamos esto la tendremos una percepción nublada, conceptos sobre la vida equivocada y una fe inconsistente.
Tiene que llegar el tiempo donde ya te decides a VENCER los hábitos que te desvían de las metas que quieres lograr.
Aquí te comparto 7 hábitos que tienes que superar para que vivas una vida plena y con significado.
1. Deja de esperar que el mundo sea como tú piensas que debe ser. Todos sabemos que la vida no es justa. Cosas malas le suceden a gente buena. Mientras más expectativas tines de cómo “debería ser” la vida – mas condiciones le pones a tu felicidad. La realidad del asunto es que no todo te saldrá bien pero en el propósito del Señor todo obrara para bien. Deja de esperar que las cosas tengan que ser de cierta manera como una condición para tu felicidad.
2. Deja de tomar las cosas tan en serio. Toma la vida en serio pero ríete de algunas de las cosas que pasan en la jornada. Nunca pierdas la habilidad de reírte de ti mismo. Mientras más descubras el buen sentido del humor que el Señor tiene más relajado estarás para disfrutar la jornada. Imagínate una vaca negra come pasto verde y la leche que produce es blanca. Relájate.
3. Deja de pensar que tu sabes que es lo mejor para ti. No hay nada más limitante para una persona que crea que se las sabe todas. Eso se llama orgullo. En muchas ocasiones lo que se supone que no sucediera produjo lo que debió suceder. Deja el perfeccionismo – nunca he visto a uno feliz. En vez de tratar de controlar al mundo y a los demás aprende a controlarte a ti mismo.
4. Deja de vivir como si fueras a vivir para siempre. Bueno en Cristo sí, pero mi tema no es la vida eterna. No te amargues por cosas que en realidad no son importantes. No gastes tus energías en cosas que de aquí a un año ya habrán pasado. No estés apagando cada fuego que se presenta. Las discusiones que tienes hoy con tus adolecentes las querras tener cuando se vayan de la casa. Vive el momento – hay cosas que nunca se repetirán.
5. Deja de estar preguntando tantos PORQUE. En vez de estancarte en él PORQUE; preguntate ¿y ahora que viene? Son más las cosas que no entenderas que las que entenderas en la vida. Apóyate en el Señor, confía en su guianza y afírmate en su Palabra – ese es un fundamento seguro para vivir.
6. Deja de estar dándole vueltas al mismo asunto. Es como un carro que se queda patinando en el lodo – termina hundiéndose más. Quizas tienes el derecho de sentirte mal pero tu grandeza está en que lo has dejado en las manos del Señor y el te guiara. Salte de ese atolladero.
7. Deja de tratar de cambiar a otros. Alguien dijo en una ocasión el mejor consejo se da cuando se pide. No seas un maestro para la gente cuando ellos no quieren aprender. Como dice el dicho popular cuando el estudiante está listo el maestro aparece. Deja que los demás sean como Dios los creo a fin de cuentas este mundo no sería muy divertido si todos fuesemos iguales.
Si te has decido dejar estos hábitos toxicos – que te parece si actualizas tu sistema operativo (corazón y mente) para vivir el resto de tu vida con mas sabiduría, alegría y propósito.
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