En Cristo heredamos todas las bendiciones que Dios le prometió a Abraham y todas las bendiciones bajo el Viejo Pacto de la Ley sin ninguna de las maldiciones.
Gálatas 3:13
Cristo nos rescató de la maldición de la ley al hacerse maldición por nosotros, pues está escrito: Maldito todo el que es colgado de un madero.
Gálatas 3:14, 29
Así sucedió, para que, por medio de Cristo Jesús, la bendición prometida a Abraham llegara a las naciones, y para que por la fe recibiéramos el Espíritu según la promesa
Y si pertenecéis a Cristo, sois la descendencia de Abraham y herederos según la promesa.
Esto es mucho decir cuando consideras todo lo que Dios prometió en el Antiguo Testamento.
Para Abraham y sus descendientes se le prometió, grandeza, fructificación, prosperidad, gran recompensa, las naciones y más… (Genesis 12:2-3, 15:1, 17:4-8,22:18)
Para aquellos que estuvieron bajo el pacto de ley se les prometió, larga vida, fructificación, abundante prosperidad, protección y más… (Deuteronomio 5:33, 28:3-13)
Como si esto no fuera suficiente en el NUEVO PACTO tenemos 12 bendiciones que Dios ha prometido a sus hijos. Por supuesto que son muchas más al final puedes dejar tu comentario y compartir otras.
1. Dios perdona todos nuestros pecados. (Mateo 26:28, Hechos 13:38) Nuestros pecados no fueron cubiertos con la sangre de toros y cabras, fueron quitados por el cordero de Dios (Juan 1:29). En la cruz la justicia fue satisfecha, Su perdón es perfecto y completo.
2. Dios no se volverá a acordar de tus pecados jamás (Hebreos 8:12, 10:17, Jeremías 31:34) En relación a la justificación es como si nunca hubieras pecado. (algunos se cayeron de la silla al leer esto)
3. Dios ha prometido que nunca volvería a enojarse con nosotros (Isaías 55:3) El Nuevo Pacto es un pacto ETERNO de amor y Justicia. Dios nunca dejara de hacernos el bien. (Jeremías 32:40)
4. Dios mismo te hace apto para participar de la herencia (Colosenses 1:12). Ahora no tiene que ver con lo que haces (el viejo pacto) o a quien estas relacionado (el pacto de Abraham) Tiene que ver con EN QUIEN CONFIAS.
5. Cristo te hace de Él y nunca te soltara. (Filipenses 3:12, Judas 24) Nada te puede separar del amor del Padre (Romanos 8:39) Por lo tanto podemos hablar de nuestra esperanza como “un ancla segura para nuestra alma” (Hebreos 6:19)
6. Dios mismo nos acredita la perfecta justicia de Jesús (2 Corintios 5:21) La justicia no se puede ganar tiene que ser recibida (Romanos 5:17) Por causa del sacrificio de Jesús en la cruz nuestra condición delante de Dios es “perfecto” para siempre (Hebreos 10:14)
7. Dios nos da el Espíritu Santo para ensenarnos (Juan 14:26) empoderarnos (Hechos 1:8) y recordarnos de nuestra justicia (Juan 16:10) Ya no necesitamos sacerdotes que sean mediadores entre nosotros, porque ahora todos conoceremos al Señor (Jeremías 31:34) Somos su real sacerdocio (1 Pedro 2:9)
8. Dios es por nosotros (Romanos 8:31) Dios nos justificó y ya no hay más condenación (Romanos 8:1) Cuando pecamos, Jesús no nos juzga – nos defiende (1 Juan 2:1) Su gracia nos empodera para vencer el pecado (Tito 2:12) El suple abundantemente todas nuestras necesidades (Filipenses 4:19) para que disfrutemos la vida en abundancia (Juan 10:10) El favor de Dios es inmerecido y no se puede ganar.
9. Dios esta con nosotros (Ezequiel 37:27) Por causa de Jesús la puerta al trono de justicia siempre está abierta (Hebreos 4:16) Podemos acercarnos con libertad y confianza (Efesios 3:12)
10. Dios nos empodera para vencer al enemigo (1 Juan 5:4) Tenemos autoridad sobre enfermedades y demonios (mateo 16:17) Vivimos bajo su protección divina (Lucas 10:19) Estamos destinados a “reinar en vida” (Romanos 5:17)
11. Dios nos ofrece su descanso (Hebreos 4:10-11) Bajo el viejo pacto era “tienes que hacer,hacer,hacer” bajo el Nuevo Pacto es hecho,hecho,hecho (Juan 19:30)Estamos sentados con Cristo en lugares celestiales (Efesios 2:6)
12. Dios mismo nos da vida eterna (Romanos 6:23)
La pregunta es ¿Y qué se hace para heredar todas estas bendiciones? Solo confiar en Cristo. Descansa en El. Escoge creer lo que dice la Escritura que El murió por los pecados del mundo – incluyendo los tuyos y resucito victorioso de entre los muertos. Déjale saber a otros que él es tu redentor y Rey.
Si nunca has hecho esto, ¿Por qué no lo haces ahora?